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4 de febrero de 2009

El artista, la obra de arte, y la sonrisa de la Gioconda.

Recientemente, ha saltado a todos los medios informativos la noticia de que El coloso, el cuadro que se conserva en el Museo del Prado, no es obra de Goya, si no de un discípulo suyo, un tal Asensio Juliá. Quien dice esto en un estudio titulado "El coloso y su atribución a Goya" es Manuela Mena, jefa de conservación y pintura del siglo XVIII. Se despacha la entendida con frases como "visto con luz adecuada, se hace manifiesta la pobreza de su técnica, de su luz y colorido, así como la marcada diferencia de El Coloso con las obras maestras, de atribución documentada de Goya".
Me parece correcto lo que la señora Mena afirma, al menos desde la vertiente técnica. Es algo que cualquier observador imparcial y desapasionado habría aducido sin ser experto en absoluto. Y que desde hace años veo notando cada vez que me fijo en El coloso. Ahora bien, ¿hace eso menos obra maestra al cuadro?¿es que el día entes de hablar esta señora, todos los que predicaban sobre su genialidad, su fuerza narrativa, su simbología, eran unos advenedizos?
Bien, demos por demostrado, eso si, subjetivamente, que el cuadro no pertenece a Goya. Entonces, ¿es menos obra maestra? Desde luego, aquí se abre un debate bastante interesante. ¿Es una obra de arte todo aquello que sale de un artista genial?¿En cuanto se descubre que no pertenece una obra de arte a un genio cualificado, deja de ser maravillosa? Desde luego, yo soy de los que creen que hoy día, el mundo del arte es un mero negocio, sobre todo en las "altas esferas", y que se pagan millonadas por obras solo porque pertenecen a Picasso, Monet, Rubens, o quien sea. ¿Dejaría de ser genial la sonrisa de La Gioconda si no fuese de Leonardo? No lo creo, pues hay obras que trascienden lo material, y ya forman parte de nuestra cultura, pero si sucedería con obras de las llamadas "menores" de muchos genios del arte universal. Tal vez sería necesario valorar cada obra artística por si misma. independientemente del genio, o no, que la haya realizado. Por lo menos siempre nos quedará la sonrisa de la Gioconda.